Ten cuidado con lo que deseas

Durante meses varios tertulianos han venido diciendo que los jóvenes de ahora no tenemos ideales, que no salimos a la calle, que no nos rebelamos, que vamos como mansas ovejas al matadero...

Con sus culos bien aposentados en sus silloncitos de cuero desde los que despotrican contra todo y contra todos, haciendo demagogias y con el

trasero bien engordado merced a los suculentos sueldos que sus amos políticos les dan para hacerles palmeros e intentar que bailemos al son que nos tocan; han estado soñando con un alzamiento de la gente controlado por ellos mismos, como si fuésemos marionetas.

Pues bien, señores, la juventud se ha alzado; se ha hartado de la situación que no hace más que oprimir a la clase trabajadora; sí, aquell@s con las manos encallecidas y espaldas doloridas que tienen que trabajar a lo bestia para llegar a fín de mes, y que se pueden dar con un canto en los dientes si sus jornadas laborales les permiten poder disfrutar de sus familias. ¿Les suena? ¡Claro que no! A ustedes esto se les antojará totalmente alienígena en sus propias carnes, pero bien que lo usan como argumento para manipular a la población.

La juventud (y los no tan jóvenes) se ha echado a la calle pidiendo cosas que son de sentido común, y rebelándose ante la situa

ción actual, contra ese juego en el que siempre perdemos los mismos mientras ustedes, cuales marranos en sus porquerizas observan bi

en a salvo de la acción mientras retozan en el lodo y siguen engordando a costa de los demás. (Recomendaría leer o releer Rebelión en la granja

de George Orwell, lo cual es bastante descriptiv

o de la sociedad actual y el papel de estos señores, intelectuales de pacotilla)

La gente se ha echado a la calle, pero como no es una rebelión a favor de sus intereses, han decidido criminalizar a todo el que se una a la protesta con la vana esperanza de sabotear algo que escapa de sus manos y que se rebela contra sus amos (los de ustedes). Reconózcanlo; han soñado con este momento, pero ahora que la cosa escapa de su control, que la gente a demostrado que no son

los borregos que ustedes creían que eran, les ha entrado el canguelo en el cuerpo, por que ni siquiera ustedes están a salvo. Hasta aquí llega el olor de sus descargas diarréicas, las cuales escapan incluso por sus bocas en forma de exabruptos y acusaciones absurdas; por que en sus cuadriculadas mentes no les cabe que este movimiento no tiene color político alguno.

Deseaban que sucediera, y ha sucedido. Y saben lo que se dice: "Ten cuidado con lo que deseas, pues podría cumplirse"