viernes, 30 de diciembre de 2016

Pensamientos y micropoemas


"Mueren ciegos jóvenes en el frente
defendiendo un trapo llamado bandera;
y su futuro, ilusiones, con su muerte, 
quedan con ellos enterrados en tierra"

"Mi amor por ti
es como una flor de invernadero:
suave, dulce y delicada;
como sólo puede ser
el amor verdadero"

"Cuál es mi sino?
Sigo los pasos del camino,
buscando mi destino,
como algo que a mi vida vino"

"Un momento que como recuerdo
a la tumba quisiera poderme llevar,
es poder con mis labios
los tuyos rozar"

"No hay personas malas:
hay personas equivocadas.
No hay personas que hagan maldades:
Hay personas que se equivocan y cometen errores"

lunes, 12 de diciembre de 2016

Día 239: Esperanza



Mi calle a las 5:50 AM
     "Todo irá bien" no paro de repetirme desde anoche. Hoy es la cita crucial con el cirujano para que empiece la recta final del protocolo. Anoche me permití bajar un poco la guardia en la cena (comida china, no debí abusar de los fideos), y hoy la báscula se ha cobrado su precio. No me preocupa, pues siguen siendo 2 kilos menos que hace semana y media, y siempre me peso antes de entrenar; además, hoy tenía planificado un entrenamiento de 3 horas que ya estoy finalizando. 

     Al estar de vacaciones, tengo que compensar el ejercicio que me faltará estos días de mi jornada laboral. Si además te llevas un mp3 con música que te motiva y te ayuda a venirte arriba, ni te cuento. 


Esto han levantado mis hombros hoy
     Hoy por fin sabré si mis esfuerzos dan fruto.



sábado, 10 de diciembre de 2016

Día 237: Avaricia


     Mío, mío, todo mío....


     A veces lo quiero todo: quiero entrenar duro, quiero resultados, y no quiero privarme de nada; ni siquiera de lo que considero placeres a la hora de comer. Es por ello que anoche sucumbí a la tentación de pedir una pizza para cenar (creedme, si probáis las de Papa John's, lo entenderéis).


     Primer problema: llegué de trabajar cerca de las 22:45, por lo que entre pedir, que llegue y cenar, se me hicieron las 00:30. Añadidle a eso el hacer la digestión, y nos encontramos con estar dando vueltas en la cama hasta conciliar el sueño (=menos horas de descanso). Teniendo en cuenta que suelo cenar ligero (eso las noches que ceno), ahí tenéis la primera consecuencia.

     Segundo problema: ¿Cuantas calorías habré ingerido? ¿Cómo se traducirá esto en la báscula? ¿Qué tendré que hacer para quemarlo? He tenido suerte esta vez: no ha habido aumento de peso. Aún así, aquí estoy, cumpliendo mi propósito de entrenar a diario.

viernes, 9 de diciembre de 2016

Día 236: Miedo


     Miedo es lo que siento cada vez que toca entrenar hombro, pues así fue cómo me disloqué el hombro por primera vez (hubo 3 veces más, y acabé en quirófano por ello)


     No es de cobardes reconocer que se siente miedo; pero negar que se tiene, sí es de estúpidos. Tiene gracia que haya sido en una obra de ficción en la que he encontrado una frase motivadora al respecto: "Sólo cuando se siente miedo es cuando un hombre muestra valentía de verdad".

     Bien cierto es: si dejamos que nuestros temores nos atenacen y paralicen, no sólo estaremos bloqueados: estaremos JODIDOS, pues nos estaremos negando la posibilidad de crecer y mejorar, estancándonos en el "No puedo" cuando en realidad es "No me atrevo"

     Sé que es más fácil decirlo que hacerlo, pero mirad de frente a vuestros miedos que os limitan; mirádles a las pelotas de los ojos y decídles "Las mías son más gordas", y acto seguido, ¡A por ello! 

     Demostrad vuestra valentía, haced frente a esos pánicos, y os aseguro que puede que no de inmediato, puede que no mañana ni el mes que viene, pero si sois constantes incluso en la valentía de enfrentaros y no dejaros acobardar, un día superaréis ese escollo, y podréis dirigirle un enérgico corte de mangas a esos límites castrantes.

     Sé de lo que hablo; hoy mismo he trabajado en hombros con el doble de peso que manejaba cuando me lesioné. 

     Creedme: Se puede

jueves, 8 de diciembre de 2016

Día 235: Compasión


     No todo puede ser entrenar duro, o el cuerpo se resiente, y hay un momento que no sólo no progresa, si no que incluso se estanca y desanda lo andado.
     Es por ello que ayer le concedí descanso al cuerpo para atacar hoy de nuevo sin piedad. Queda menos para el Lunes, y me he propuesto darlo todo. Hoy cardio, dorsal y tríceps; entrenamiento corto de hora y media, porque mañana pienso dar tralla en cardio y hombro, y no descarto entrenar un poco Sábado y Domingo también 


martes, 6 de diciembre de 2016

Día 233: Rabia


     Eso es lo que sentí al enterarme que la báscula del endocrino del hospital está trucada con dos kilos de más. Eso explica el aumento y bajadas de peso tan brutales de un día para otro cuando el esfuerzo de entrenamiento y sacrificio de dieta es el mismo; la misma rabia que siento cuando encima del disgusto de ver esa inexplicable subida de peso, te dan a entender, no sin cierto desprecio, que no te esfuerzas lo suficiente (Malditos hijos de...!)

     Intento de todos modos, aprovecharme de esa rabia y sus efectos; junto con la misma, vienen unos picos de adrenalina y mala leche que hay que descargar; Y qué mejor manera de hacerlo que entrenando? De camino al gimnasio me pongo las noticias de la radio, mientras recuerdo cada visita al endocrino, el trato que me dan, cada frustración y cabreo del trabajo del día anterior... Cuando bajo del coche ya estoy prácticamente masticando la mala leche acumulada y la bilis que me va subiendo desde las tripas, mientras un gruñido se va formando en mi garganta. En ese momento, ya estoy listo para entrenar y soltar toda esa rabia en un entrenamiento más fuerte, más intenso, más duro; y no paro hasta que las ganas de pelea no desaparecen por completo.

     Puede que emocionalmente no sea bueno, pero para entrenar me va de miedo.

     Por cierto, a día de hoy, al pesarme, he alcanzado el objetivo que me puse para toda la semana: bajar esos 4 kilos que me propuse. Ahora toca mantenerlos (y si puedo bajar aún más, mejor)

lunes, 5 de diciembre de 2016

Día 232:Voluntad



     En efecto, hace falta bastante fuerza de voluntad para levantarse a las 5:20, prepararse, y estar a las 6:00 entrando al gimnasio para cascarse dos horas y media de entrenamiento.


     Hoy, incubando como estoy un catarro, me ha costado especialmente levantarme de la cama, pero aún así, lo he hecho. Lo gracioso? Hoy quien abría el gimnasio se había dejado las llaves en casa y tuvo que volver, ocasionando que entrásemos más tarde. Yo tengo cierta paciencia, y he estado bromeando con este grupo de locos desconocidos que como yo, vienen a primera hora a entrenar; pero algunos ya empezaron a impacientarse, aporrear la puerta, e incluso decían de forzarla y entrar de todos modos aunque sonase la alarma. Justo cuando me planteaba volverme a casa a dormir, han llegado a abrir, y vernos entrar a un grupo de 20 tíos casi en estampida ha tenido que ser de foto.

     Hoy ha tocado pierna (unos 6 ejercicios), abdominales, y el resto cardio. Han habido momentos en los que me he sentido altamente tentado a tirar la toalla: un ligero mareo, náuseas, sensación de presión en la cabeza, corazón desbocado pugnando por salir por la boca... pero no lo he permitido; mi voluntad (o locura, según lo miréis), me ha llevado a seguir hasta el final.

    Hoy la báscula me ha dado la alegría de seguir bajando peso aunque no haya entrenado ni Sábado ni Domingo, así que, ya sabéis:


viernes, 2 de diciembre de 2016

Día 229

     #Feedmemore hoy sesión de 4 horas dándole caña a todo el cuerpo. Mi intención la próxima semana es la de entrenar TODOS los días. 

     Me he puesto como meta, de aquí a mi próxima cita con el cirujano perder mínimo 4 kilos, y no pienso tener piedad.

     Hoy he dejado atrás otro límite: en remo muevo ya casi mi propio peso, y eso que hoy entrenaba todo el cuerpo; la semana que viene, que haré un músculo por día, será salvaje.

miércoles, 30 de noviembre de 2016

Día 227


     Hoy toca descanso de entrenar, y buena falta que me hacía. Me he levantado cerca de las 10:00, y tocándome los brazos, los he notado bien duros (y eso que ayer sólo hice cardio), y me noto las piernas más firmes. 

     Como comentaba, el reposo y el descanso también es bueno, pues los nuevos tejidos musculares empiezan a asentarse en su lugar, ocupando huecos que antes eran territorio de la grasa corporal. Tal vez eso explique que esta semana el peso se estanque e incluso suba, pues hay crecimiento muscular, o eso quiero creer.


     Mañana retomamos tras el reposo.

martes, 29 de noviembre de 2016

Tras el exilio (Desde el Exilio XXV)




   Van a hacer casi dos años desde que volví de Panamá; y en estos días, tal vez en un ejercicio de añoranza, me han venido a la memoria una serie de expresiones de allí que estoy pensando en adoptar, en parte por nostalgia, en parte porque me gustan. Procedo a enumerarlas


Papa (así, sin tildes): Normalmente utilizado en dentro de la expresión "¡Ay, papa!". Es una forma de referirse a un amigo varón. Es más o menos nuestro equivalente al "¡Jo, macho!" Probabilidad de adoptar esta expresión: 30%

Agüeváo: Aunque en América latina es muy común, aquí lo he oído con especial énfasis a la hora de meterse con alguien. Se usa indistintamente para referirse a alguien holgazán, o un poco alelado o falto de iniciativa. De vez en cuando se me ha escapado esta expresión, por lo que la tengo ya implantada casi en mi vocabulario

Doñitas: Esta expresión sí que me ha llegado especialmente. Se usa para referirse a las señoras mayores de toda la vida de la parroquia. Cuando la usan, tiene un deje de cariño al decirlo. En España, el equivalente es un poco más despectivo. Muy seguramente la acabe usando del todo; de hecho, alguna vez se me ha escapado.

Coima: Esto es lo que conocemos vulgarmente como "soborno" cuando dicen que alguien es un "coimero" se refieren a un caradura que por un dinerillo/comisión (soborno de toda la vida), hace la vista gorda de su labor, o que se aprovecha de un puesto de poder que pueda tener, para hacer un mal uso de este para que la persona que sea, con tal de evitar la multa, le de una coima al personaje en cuestión. (Esta creo que la adoptaré también)

Juegavivo: Esta expresión se usa teóricamente para designar a una persona ágil de mente, astuta; pero en el uso diario, se usa para referirse al típico caradura u oportunista. Esta ya se me escapa de vez en cuando

Biencuidáo: Esta palabra es la que se usa para lo que viene a ser un "Gorrilla" de los de toda la vida. Viene de que te digan cuando lo aparcas y les das un dólar "le queda el carro biencuidáo". En mi día a día no tengo que lidiar con estas personas, pero en Panamá, por motivos de trabajo, lo hacía casi a diario. Supongo que por el desuso, la tengo casi olvidada

El punto es: ¡Ufffff! Esta expresión, mal que me pese, se me ha pegado al final. En España usamos "la cuestión es..." pero claro, entre que lo oía a diario no sólo en el trabajo y la parroquia, si no también en la radio y en las traducciones de las series (incluso cuando se trataba de subtitulado), pues... eso, que ha pasado de ser una frase que se me antojaba totalmente alienígena, a una que, pese a mi férrea resistencia, se ha introducido en mi vocabulario habitual.

Guineo: A ver, que aquí es cuando viene la anécdota divertida: Aquí en España conocemos el nombre genérico "Plátano" para referirnos a la fruta en general, y sólo a partir de venir las bananas latinoamericanas, sí que hemos usado la palabra banana para distinguirla de nuestro plátano canario. Pues bien, os paso a decir las tres definiciones que teníamos allí:
     Plátano: Se usa para referirse al plátano macho, el cual se tiene que comer siempre cocinado (ya sea hervido, asado o frito; si te atreves a comerlo crudo, es como darle un bocado a una barra de serrín prensado.
     Banano: La banana de toda la vida: grande, carnosa pero rígida y con poco sabor si la comparamos con el guineo
     Guineo: Mucho más pequeño (dos guineos de tamaño grande puestos a continuación uno de otro, abultan lo que un banano), mucho más carnoso y dulce; su sabor recuerda a nuestro plátano de canarias. A base de pedir guineos en las fruterías durante el tiempo que estuve allí, estuve los 6 primeros meses en España llamando al plátano "guineo".

¡Qué sopá/xopá!: Saludo típico de allá. Viene de invertir las sílabas de la segunda palabra "pasó"
. Esta expresión la voy a recuperar porque me hace especial gracia, y es la que distingue propiamente a los panameños del resto de gente de latinoamérica. Sería una pena borrar de golpe y porrazo los años vividos allí. Sí que me gustaría que, como seña de identidad, y recorrido por allá, este fuese uno de los rasgos.

Guaro: Licor, alcohol.

Llego en 5 (10, 15...): Forma sobre todo muy copiada de los yankees de decir "Llego en 5 minutos". Esta sí que la suelo usar bastante

Chombo: Persona de raza negra. Normalmente asociado a personas que el color de su piel es muy, muy oscuro, por lo que se excluyen los mulatos. A veces se usa el diminutivo para hacerlo sonar más afable

Berraco: Arrojado, Atrevido; y en algunos casos, salvaje o animal refiriéndose a sinónimos de la palabra bruto

Vidajena: Cotilla, metomentodo

Tranque: Atasco. Esta expresión es el pan de cada día de los Panameños de la capital. Lo viví en plenas carnes y me suena mucho mejor a nuestro "Atasco de tráfico"

Las expresiones que pongo a continuación, no me sale usarlas ni natural ni forzado, pero aún así, las pongo para que las distingáis por si se me escapa alguna

Regañadera: Bronca

Cueco: Forma despectiva de llamar Gay a alguien. Sería el equivalente a nuestro "Maricón" dicho con desprecio.

Ayala (ashala o axala) vida/peste/verga (este último es muy malsonante y vulgar): Es el equivalente a nuestro "¡Andá, la leche!" o "¡Aivá, la ostia!" Esta expresión probablemente no la use. Me queda muy forzada, y no me sale naturalmente

Chuleta: Expresión de sorpresa. Sería el equivalente al "Cáspita" que ya sólo se lee en los cómics de los 80.

Chuzo (pronunciando la z con un ligero seseo): Expresión de sorpresa, pero un poco más ruda. Sería el equivalente a nuestro "Coño" como expresión

Fulo/a: Rubio/a

Barón: Predicador protestante; por lo general, Evangélico

Rumbear (pronunciando la e como una i): Salir de fiesta

Parkear (parquiar): El equivalente a nuestros botellones en los párkings

Soda: Refresco

Cholo: Hombre sencillo, campechano; por lo general, persona del campo

Presa: Porción, por lo general, referido al pollo frito

Carne de Res: Carne de vaca. No se consume la ternera en Panamá

Mondongo: Nombre con el que se refieren a los callos (y a la casquería en general en según qué regiones)

Dar un aventón: Llevar a alguien con el coche o acercarle a algún sitio

Camarón: Encargo, recado; trabajo de muy corta duración, hacer una chapuza.

Tener Goma: Tener resaca

   Seguramente me esté dejando unas cuantas expresiones, pero son de las que me acuerdo ahora mismo. Si me vienen más a la memoria, las iré añadiendo


Día 226


     Hoy toca sólo cardio, que ayer se me fue un poco la mano con la comida: 20 minutos de elíptica, otros 20 de bici sentada, +20 de cinta y rematamos con 30 de bici.


     Una de las cosas fenomenales del gimnasio es que aquí no importa el color de tu piel, país de procedencia, religión, sexo o tendencias políticas; da igual que seas más alto o más bajo, más gordo o más delgado... (casi) todos venimos a entrenar, a ejercitarnos, a superarnos, y a tratar de sacar lo mejor de nosotros mismos.

     Matizando lo que dije ayer, no desprecio el esfuerzo ajeno, siempre y cuando sea esfuerzo. Una cosa es no poder hacer más repeticiones, cargar más peso o hacer más cardio porque no se pueda, y otra es holgazanear y venir a pasar el rato, hacerse selfies, lucir palmito, o criticar junto a quien nos acompaña a los demás porque "¡mira qué patético el gordo aquel!" "¿te has fijado en las cartucheras de esa?" mientras ocupan un banco, máquina o bici que ni usan (creedme, todo eso se ve y se oye)

     ¡En fin! Allá cada cual, pero venir a eso se me antoja tirar el dinero.
¡Sed felices, y a por el Martes!


lunes, 28 de noviembre de 2016

Día 225


     Sacudiéndome la pereza, vuelvo al gym. Veo que en el finde he recuperado 400 gramos, pero no me preocupa, pues no es uno o dos kilos; ¡A entrenar!


     Iba a ir suave, pero una vez que entras en calor y el sueño se va, te empiezas a emocionar y... que otro día que supero las 3 horas de entrenamiento cuando tenía en mente hacer 2 como mucho.


     He de reconocer que es duro venir a entrenar sólo, y que me gustaría tener un compañero de entrenamiento, ya sabéis: alguien en quien apoyarte y que te anime a ir aunque ese día no te apetezca y quieras holgazanear, alguien que te anime a hacer una repetición o serie más, alguien que te controle y vigile para que no te lesiones, o que te frene y te diga que ya es suficiente por hoy; y a la vez, ser tu lo mismo para esa persona. Sin embargo, siempre he entrenado sólo, sin compañía, por lo que la motivación me la he tenido que dar yo mismo; sólo tuve compañero una vez, y lo siento mucho, pero se le iba mucho la fuerza por la boca, y sólo me aguantó dos sesiones (lo siento, pero si vas a entrenar, vas a entrenar; no a ir media hora a estar simplemente sentado en la máquina/banca charlando y haciendo sólo una serie sin peso); NO quiero alguien así entrenando conmigo. Lo siento si soy radical, pero o entrenas, o entrenas; lo demás no me sirve.

     Poco a poco, voy acercándome a mi meta; cuando empecé está aventura, pesaba 170 kgs y gastaba una 64 de pantalón; a día de hoy, estoy en 152 kgs, gastando una 58 que ya se me cae y bajando. Aún me queda camino por recorrer, miro al horizonte, y veo la meta aún lejana. Pero eso no me desanima; miro hacia atrás y veo lo ya recorrido, y sé que esa distancia antes estaba delante, sumándose a la que tengo actualmente. "Ya queda menos" me digo "y con ayuda o sin ella, pienso lograrlo"

     ¡¡Buenos días de Lunes!!


domingo, 27 de noviembre de 2016

Día 224

     Tras la jornada brutal del Viernes (4 horas de entrenamiento debido a lo lleno de energía que me sentía), repaso resultados e impresiones. 


     A mitad de entrenamiento, sentí mis fuerzas flaquear; fui a la taquilla y me tomé el batido que suelo tomar tras entrenar, en ese momento. Eso me dio una inyección de adrenalina/energía como para terminar (de hecho, el agotamiento desapareció)


     Quise explorar mis límites, ver hasta dónde era capaz de llegar; los resultados no me los habría creído este verano. Aunque el precio fue un poco alto, pues me abrí la muñeca. Me miré al espejo nada más volver a casa, e incluso me quité la camiseta, pero no aprecié nada.

     El Sábado me levanté con una sensación que creí olvidada: ¡¡¡Con agujetas!!!! Eso quiere decir que voy por buen camino. Pero aún me quedaba una sorpresa: ¡¡¡se aprecian cambios!!! Está claro que el descanso fue vital para el desarrollo.

     Así que ya saben, niños y niñas, no olviden súper vitaminarse y mineralizarse!


viernes, 25 de noviembre de 2016

Día 222: Relatado a lo Ángel Sanchidrián


Tras 4 horas de entrenammiento salvaje
     Esto es un chiquín (lo de "chiquín" es un decir, porque mide más metros de eslora que el Titanic, y cuando va por Plaza de Castilla las torres Kio se inclinan al lado contrario para dejarle pasar), que al hacer recuento un día de su armario ropero, descubrió que allí había en las tallas más X que en el videoclub de un Sexshop; por lo que ni corto ni perezoso, decidió ponerse a plan. Como con la dieta, a pesar de pasar más hambre que Carpanta no era suficiente, decidió apuntarse a un gimnasio. 

     Tras estar rodeado de chiquinas y chiquines que van más a posar y hacerse fotos y mirar con desprecio a nuestro "Lorzamán" protagonista que a eso de sudar, que es de pobres y gente sin glamur, nuestro protagonista decidió fijarse en esos tíos que cuando las viejas los ven, se cambian de acera abrazando el bolso; tíos de esos que uno no sabe si tienen más músculos, venas o tatuajes en el cuerpo; pero lo que nunca tienen los pobrecitos, es ropa de invierno que ponerse, ni una triste sudadera.


     El día que nos ocupa, nuestro protagonista se sentía lleno de energía, y quería gastarla, y cómo eso de practicar el bullying de "cinco contra el calvo" está feo y es de adolescentes, se fue a ver si sudando 3 horas se le iba la tontería. Rápido se integró con el resto de la tribu, que al levantar peso no se sabe si andan estreñidos, o son primos de Chiuaca de la peli esa de la Guerra en el Espacio. Como también quería sentirse uno más, se puso en una máquina de esas en las que te tumbas a raspanuca, y al tercer alarido, vino el Jorge Lucas (que debe ser el primo gordo y viejo del Jorge Javier de Telecinco) a traerle el diploma de Filología Guki, y su primo a ofrecerle un puesto en un programa de bíceps y berzas o algo así. Como nuestro protagonista se sintió ofendido en su virilidad, le dio un sopapo de esos que afeitarían a Chuc Norris, y el pobre aterrizó en el restaurante de Chicote, donde éste le enseñó a vestirse con estilo prestándole una de sus camisas que uno no sabe si es camisa o hule de Ikea.


100 Kilos en fondos de tríceps
     Nuestro protagonista, al ver que la báscula, tal vez acojonada por lo que veía, le dijo que esa semana había perdido dos kilos más (19 desde que empezó su aventura), se vino arriba, y decidió entrenar TODO su cuerpo, y fue a una de esas máquinas que usan las chiquinas para "tonificar el culo". Cuando vio que ya sería capaz de partir las nueces de tres en tres, apretando las nalgas (cocos no, que él es muy hombre, y eso de cosas duras y peludas por la retaguardia no le entusiasman), decidió relajarse; lo hizo tanto, que decidió ir al baño, no fuera que la convención de Ginebra (aunque a él le va más el tequila), viniera a detenerle por ataque terrorista con armas químicas.


    Con la satisfacción del deber cumplido, se fue al vestuario donde vio que nadie tenía frío: ahi todos iban encuerados, hablaban encuerados, bailaban encuerados... por lo que él, queriendo integrarse, imitó a los congéneres encuerándose; tras quitarse los tres pares de camisetas que llevaba puestos para sudar como quien le quita el papel a un sobao pasiego que ha caído por accidente al Cola-Cao, escurrió la camiseta y allí salió agua como para montar un parque acuático en el desierto de Gobi, se quiso integrar haciendo la molineta, y soltando su mejor gruñido Guki cual macho alfa. 


     

Tras ser despedido por sus compañeros de manada con un sentido gesto del dedo largo levantado, se vistió y marchó a casa satisfecho.
Te recomiendo esta sesión si te gusta que las viejas se crucen de calle abrazadas al bolso al verte, o si quieres doctorarte en Filología Guki

martes, 22 de noviembre de 2016

Día 219

     ¡¡¡Bienvenidos a la Semana Fantástica del Cardio!!!


     Aunque visualmente no aprecie cambios, sí que se notan en el rendimiento: haciendo el mismo tiempo en la elíptica para calentar (20 minutos), hago 100 metros más de recorrido que hace dos semanas. Sé que sonará raro (y un poco asquerosito), pero me gusta sentir mi ropa empapada del sudor de mi esfuerzo, ver la máquina brillar por la película que deja el mismo al derramarse, y notar la visión nublada porque los cristales de las gafas están anegados también.

     "¿Por qué vas tan temprano a entrenar?" Me preguntan. Bien, lo hago porque a partir de las 7:00, todas las cintas de correr, y la zona de abdominales están llenas y con gente esperando; así que a las 6:00, cuando abren, sólo estamos los que sólo hacen musculación y yo. No obstante, ya no uso la cinta por dos motivos: el primero es porque noto más eficaz la elíptica; rompo a sudar antes, trabajo más en esta, y no hay tanta gente en ellas. El segundo es que, debido a la fascitis plantar, el médico me desaconsejó usar la cinta.

     He observado, sin embargo, un cambio de tendencia; cada vez hay más gente entrando a las 6:00, y ya he notado que hay gente que imita mi rutina (veo que me observan y repiten lo que hago calcado). 

     Por un lado me halaga, pero por otro me preocupa, pues... ¿Y si me equivoco y estoy haciéndolo mal? ¿No estaré sentando un mal ejemplo? Los entrenamientos deben ser personales: lo que me sirve a mí, no tiene necesariamente que servirle a los demás, y viceversa.

     ¡En fin! Yo seguiré a lo mío. ¡Feliz Martes!


lunes, 21 de noviembre de 2016

Día 218


     Tras otro parón forzoso debido a la prueba médica de la semana pasada, retomo entrenamientos. 


    Me mantengo en el mismo peso, y se exactamente qué ha pasado, por lo que sé qué corregir y cómo hacerlo. 


     Vamos a por otra semana!


miércoles, 16 de noviembre de 2016

Día 213

     Prueba superada: tras el ayuno forzoso, una comida sólida (no me he atrevido a más), y el resto del día medio groggy por la anestesia (+ la debilidad de haber estado a base de líquidos + el cansancio de haber dormido mal por los nervios)
     Todo hay que decirlo: las muchachas se han portado de maravilla conmigo, y el trato ha sido amabilísimo. 
     ¿Lo negativo? Voy a tener que entrenar con más ahínco, a ver si así mejora la visibilidad de mis venas, porque las pobres las pasan canutas cuando tratan de ponerme una vía (aunque el vitiligo tampoco ayuda mucho; uno diría que al carecer de pigmentos, la piel sería más transparente, pero no es así; al menos en mi caso)

martes, 8 de noviembre de 2016

Día 205

     Lo que me ha costado levantarme de la cama hoy! Sin embargo.... Avanti a toda máquina!!! 

     Continuamos con los 20 minutos de elíptica para calentar. La verdad, antes la odiaba; pero ahora le veo más utilidad que a la cinta, pues rompo a sudar antes, y cuando me bajo, ya tengo el corazón como una locomotora a tope. 


     Hoy ha tocado dorsal y tríceps, previo paso por la báscula (1,5 kgs menos, pero no voy a bajar la guardia): "Una serie más" "Cáscale más peso, a ver hasta donde llegas!" Me decía a mí mismo, hasta que, por prudencia (aunque me sentía capaz de más), he decidido poner un tope y no pasar del mismo para evitar nuevas lesiones, que al fin y al cabo, esta tarde curro también.


     Hoy veremos si realmente los batidos sustitutivos tienen el mismo efecto que los de proteínas (en teoría, y según el prospecto, sí)


lunes, 7 de noviembre de 2016

Día 204

     ¿Qué día es hoy? Ya no me acuerdo.... (pongamos que es el día 204):


     Tras dos meses (con sus interrupciones de por medio por causas ajenas a mi voluntad) de circuito, retomamos tabla. 


     Hoy descubro que se me acabaron las proteínas, y como este mes ya llevo demasiados gastos, trataré de pasar sin ellas hasta Diciembre.


     Tras ser diagnosticado de fascitis plantar, y siguiendo las recomendaciones del médico, abandono la cinta, y concentro el cardio en la elíptica (pasando de 15 a 20 minutos para empezar la rutina) y la bici (de 15 a 30 minutos al finalizar)

     Hoy ha tocado pierna, y hombro (con ronda de abdominales de por medio).

     ¿Progresos a día de hoy? Veo mi cuerpo más esbelto en general, exceptuando la zona del vientre, la cual no evoluciona igual que el resto del cuerpo (o al menos no al mismo ritmo; ¡haz el favor de bajar de una vez, cabrona!)

     Parece que mi hombro es capaz de más tralla de la que me doy, lo cual es de agradecer, pero no quiero arriesgar ni forzar; aunque me recuperé muy bien de la operación, recuperando el 100% de la movilidad y fuerza frente al 70% pronosticado por el cirujano, aún recuerdo el dolor de las luxaciones, y la rabia e impotencia por tener que estar inmóvil; y creedme: no quiero volver a pasar por ello.

     ¡¡¡A por el Lunes!!!


sábado, 5 de noviembre de 2016

Malaventuranzas

Feliz el ambicioso, pues no dudará en arrasar con todo y todos en su camino con tal de alcanzar sus metas. Desgraciado el ambicioso, pues ese afán le dejará sólo”
“Feliz el violento, pues impondrá su voluntad sin necesidad de razón a base de golpes, esté o no en lo cierto. Desgraciado el violento, porque será temido, pero jamás amado”
“Feliz el que no llora, por que nadie le verá flaquear ni mostrar debilidad. Desgraciado el que no llora, pues si la gente no sabe que sufre, no le consolará, y estará sólo en su dolor”
“Bienaventurados los injustos, pues se salen con la suya. Bienaventurados los injustos, pues la justicia les arrebatará lo que con malas artes consiguieron”
“Bienaventurados los crueles, porque hundirán sin piedad a sus enemigos. Desgraciados los crueles, pues con su propia crueldad serán tratados sin esperanza de piedad o misericordia”
“Bienaventurados los impíos, porque no se esclavizan a regla alguna. Desgraciados los impíos, porque ellos mismos se alejan de Dios sin posibilidad de dar marcha atrás”
“Bienaventurados los belicosos y los que siembran cizaña, ellos obtendrán lo que desean con el sufrimiento ajeno. Desgraciados los belicosos y los que siembran cizaña, pues jamás conocerán la Paz, y su propia cizaña crecerá y les ahogará”
“Bienaventurados los que persiguen a los justos, pues sus impíos amos les pagaran gustosos. Desgraciados los que persiguen a los justos, pues la justicia les alcanzará”
“Bienaventurado el que injuria y persigue al creyente, pues se sentirá mejor y uno más en la sociedad. Desgraciado el que injuria y persigue al creyente, pues siente envidia su felicidad en Dios, y como no es capaz de alcanzarla, prefiere destruir la que el creyente tiene”


 “Que se alegren y regocijen, porque su vana recompensa terrena, de nada les servirá cuando llegue el reino de Dios, y entonces, desgraciados serán”



sábado, 29 de octubre de 2016

Día 193

     La semana está siendo más intensa de lo esperado, lo cual, unido a la pereza de levantarme tan temprano, las pocas horas de sueño que tengo, y las dolencias y lesiones acumuladas hacen que cada vez me cueste más tirar adelante y ponerme en pie y continuar con el camino emprendido. 


     Reconozco que se hace muy cuesta arriba, y que en ocasiones me siento sólo en esta lucha, lo cual tampoco ayuda demasiado.


     Pero soy muy cabezota, y ahí sigo, como "el Lute", en plan "Camina o revienta", sin tirar la toalla 


     Creo que mañana me vendrá muy bien esa hora "extra" de sueño

lunes, 24 de octubre de 2016

Día 189

- Estoy cansado
- ¡Arriba!
- ¡Ten piedad, que sigo con molestias!
- ¡Arriba!
- ¡Que he dormido mal!
- Nadie te obligó a acostarte tarde
- Los pies siguen dando por saco
- En Abril fue el tirón, en Junio-Julio la fascia, en Septiembre-Octubre el agotamiento... el caso es poner excusas. ¡LEVANTA Y VE A ENTRENAR, CARAJO!
Yo esta mañana

jueves, 13 de octubre de 2016

Día 178

     Tras el forzoso parón de entrenamiento para recuperar energías (se me fue muy mucho la mano entrenando y acabé con una fatiga continuada), hoy he retomado los entrenamientos.


     He empezado suave, pues, aparte de testear el cuerpo, me toca llevar al enano al cole, por lo que no podía estar hasta las 8:30-9:00 en el gimnasio


     Parece que no he perdido mucha forma física, y el cuerpo no ha respondido mal del todo.


     La hora de la verdad vendría a la hora de subirse a la báscula, y me he sorprendido: No sólo no he subido de peso ni me he estancado; si no que incluso he bajado. Tras el efecto rebote que tuve en Septiembre, hoy he vuelto al peso que tenía en Agosto cuando me revisó por última vez la enfermera de endocrinología.

     La hora de la verdad será el Lunes cuando el cirujano me vea, por lo que tocará andarse con mucho ojo de aquí a entonces


miércoles, 28 de septiembre de 2016

Día 163

     ¡No puedo! 

     Mi cuerpo me clama por descanso. Se ve que le he estado exigiendo más de lo que puede dar, y la respuesta es una sensación de fatiga generalizada. El Lunes descansé tras el intenso fin de semana, pero ayer, aunque no tenía fuerzas para levantarme a las 5:00, sí lo hice a las 7:00 para entrenar. Hoy tocaba descansar tras el entreno del Martes (Repetí la rutina del Sábado, es decir: mi tabla con los ejercicios de propina), pero me estoy encontrando como si hubiera quemado todas las celdas de energía de mi cuerpo.

     A dos días de volver a mi rutina laboral, creo que no es buena idea el forzar la máquina (tiene huevos no haber descansado realmente ni uno sólo de los días de mis vacaciones); así que he tomado la determinación de hacer campana en el gym lo que queda de semana, y retomar con energía y brío renovados a partir del Lunes.

     ¡No me miréis así! El cuerpo también necesita descansar y reposar, y eso hace mucho que no sé lo que es

jueves, 22 de septiembre de 2016

Día 157

     (No lo leáis si sois sensibles, que me voy a poner escatológico)


     Hoy he tenido una experiencia que algunos dirán que es científicamente imposible: ¡He sudado la grasa! Hoy he querido probar con doble ración de entreno, y en un momento que me he ido a limpiar el sudor de la segunda sesión, he notado el tacto del mismo diferente: no era el líquido acuoso al que estoy habituado, si no algo más denso y untuoso (¡Cágate lorito con la palabrota!), que, además, ensuciaba la toalla.


     Siguiendo con las "guarrerías", he notado también que, además, de un tiempo a esta parte me he vuelto más flatulento... ¿Será por el meneo de vientre? El caso es que además son de los trompeteros, y estoy pensando ya en ofrecerme como "sección de vientos" para orquestas de Fiestas de pueblos y así me saco un sobresueldo, que la cosa está mu' malita