martes, 29 de enero de 2013

Tres negaciones (o el miedo de Pedro)


Siente cómo se tensa el músculo,
cómo vuela la sangre en las venas,
cómo se eriza tu cabello,
y cómo se te encoje el escroto.
Cómo el sosiego se ha roto,
cómo desaparece lo bello,
cómo el miedo corta cenas
y se te llena de mierda el culo.
¿Donde estás cuando le entregan?
¿Donde escondes la verdad?
¿Por qué lo abandonas?
¿Donde te has metido?
¿Por qué te sientes perdido?
¿Por qué no perdonas?
¿Por qué no tienes piedad?
¿Por qué miras cuando le pegan?
Sabes que le van a matar.
No sabes por qué, pero tú pegas.
Tú le has abandonado
y te has desentendido de su amistad.
Te resistes a la sinceridad,
eres peor que el que le ha entregado.
Y por tercera vez le niegas,
y oyes de nuevo al gallo cantar.

1 comentario:

  1. Gracias por regalarnos ahora tu faceta de poeta, nunca dejarás de sorprendernos.

    ResponderEliminar